La economía colaborativa es la nueva tendencia irreversible de hacer negocios a nivel mundial. Normalmente estas economías colaborativas están basadas en plataformas digitales que permiten unir las dos puntas; por un lado el interesado en “vender” y por el otro lado un interesado en “comprar” el bien o servicio.
¿Qué caracteriza una empresa que utiliza este modelo a otra que no lo hace?
Los modelos de economía colaborativa normalmente reducen significativamente los costos de intermediación reduciendo así el costo total del bien o servicio. También permiten tener una escalabilidad o crecimiento exponencial. Así mismo, amplían la capacidad de tener una gran cantidad y diversidad de información logrando altos niveles de respuesta y confianza.
En el caso de la economía colaborativa aplicada a la investigación de mercados, se esta revolucionando esta categoría ya que se pueden reducir a una fracción los costos y tiempos de entrega, mientras se aumenta considerablemente la confiabilidad de la información colectada.
Por ejemplo:
Antes una empresa que quería testear un producto o una nueva campaña, acudía a hacer un focus group donde sentaba en un salón a 20 personas para obtener su opinión. Normalmente en este proceso uno de los asistentes toma la vocería del grupo y sesga completamente la opinión de los demás. Este tipo de estudios representa altos costos y los resultados no son los mas acertados.
Por el contrario con la metodología de comunidades colaborativas, este mismo estudio se puede conducir en un solo día, y no entre 20 sino entre 200 personas a un costo mucho menor. Una muestra mayor y más diversificada se traduce en mayor confiabilidad de la información.
